He decidido hacer una reflexión sobre mi práctica docente desde un recorrido narrativo de las distintas actividades que fui realizando.
Microclase
Mi primer experiencia con mi pareja pedagógica fue armar juntos una microclase. Debido a nuestra naturaleza independiente, y a que estábamos muy ocupados en su momento, realizamos en muy poco tiempo la planificación.
Si bien puede decirse que esta fue poco exitosa por la falta de trabajo, creo que también hubo en nosotros una omisión del grupo que teníamos presente. No consideramos que estos eran temas ya tocados por nuestros compañeros, que ya son más grandes, y que además somos un grupo pequeño. Por ende la exposición pura en este ámbito estaba destinada al fracaso.
Fue una buena lección en el sentido de que a veces aunque uno crea que algunas estrategias son comodines en el par docencia/aprendizaje, en el fondo no lo son, o deben ser adaptados de alguna manera al grupo para ser efectivos.
Por otro lado, nos enseñó el valor de tener varias estrategias en mente, o de planificar con detalle, para tener por ejemplo en cuenta el tiempo. En nuestro caso yo suelo extenderme de más, y mi compañero suele ser más acotado, lo cuál parecería ser complementario pero en la práctica nos pasamos del tiempo y quedamos descordinados.
Sin lugar a dudas fue una buena experiencia previa, para estar más alerta en el momento de realizar las planificaciones de la práctica real, que además serían tres.
La importancia de la 2da observación
Este subtitulo resalta lo clave de este momento. A mi parece es bastante evidente la importancia de la observación. Inclusive para alguien confiado conocer ciertas cuestiones como cómo es el aula, cuánto dura la clase (en la práctica), cuántos alumnos son, etc; puede ser clave para facilitar el trabajo. ¿Entonces qué valor podía tener la segunda observación? Para nuestra sorpresa fue importante esta, ya que nos permitió corroborar las hipótesis que formulamos en la primer observación sobre como funcionaba el grupo, y sentirnos bastante más seguros sobre las estrategias docentes seleccionadas, que luego fueron verdaderamente efectivas.
Entrevista
De la misma manera que la 2da observación fue útil como contraste de hipótesis, la entrevista sirvió como evento confirmatoria. Todas aquellas observaciones e ideas que teníamos, las contrastamos con la profesora. En general este grupo es bastante transparente, y no había mucha problemáticas de fondo. Sin embargo fue bastante importante para nosotros recibir no sólo la certificación de que nuestras observaciones eran similares a las de la profesora, sino a que nuestras ideas serían optimas para el grupo. La entrevista también es clave para entender la trayectoria del grupo en la carrera, y por ende, los objetivos que pueden plantearse al respecto. Por ejemplo, como son los otros docentes, o de dónde viene el grupo, o inclusive que tipos de conocimiento la profesora percibe que ellos poseen.
Piaget reloaded
Un obstáculo que se nos presentó inmediatamente al pensar las primeras 2 clases fue la presencia de Piaget. No es que haya nada malo en su teoría, sino que nos tocaba un doble desafío. En primer lugar la profesora ya había presentado la teoría, y asimismo, los alumnos la desarrollarían mejor en otras materias de su carrera. En segundo lugar, debido al nivel del grupo con el que se trabajaba era imposible pensar una profundización académica pura, sino que tenía que ser un trabajo más detallado desde la práctica.
Asimismo, nosotros tampoco manejábamos con soltura la teoría, y el breve tiempo que teníamos para pensar la clase, lo sentimos como un desafío. Por ende cuando logramos encontrar diferentes estrategias (como el trabajo en grupo, la exposición dialogada, etc), fue bastante satisfactorio. Más aún cuando de una clase a la otra fuimos ajustando estas (por ejemplo, sumando una consigna a responder por escrito ya que sino les costaba cumplir con esta) acorde a lo que observábamos al desarrollar nuestras clases.
Un cierre apresurado
Si bien las dos primeras clases se siguieron con naturalidad, modificando nuestras estrategias acorde a las respuestas que recibíamos, la última fue un poco descolocada. El hecho de que se perdieron clases, y que el formato del examen se modificó, nos implicó que tuvimos que en breve tiempo reformular nuestra planificación. Si bien logramos (a mi parecer) presentar una clase que les fuera valiosa a los alumnos, esto fue hecho de manera apresurada, y nos hubiese gustado tener más tiempo no solamente para trabajar los textos en mayor profundidad (y tal vez llevar un punteo mejor pensado) sino también para
Conclusiones
Concluyendo esta reflexión, es claro que si bien contábamos con previas experiencias, esta fue una enriquecedora experiencia, que nos puso en jaque en algunos sentidos, pero a la vez en un ambiente protegido y sencillo, permitiéndonos aprender sin muchas problemáticas. El grupo respondía sin problema ante las propuestas, mostraban interés, y además era un grupo grande con alto porcentaje de asistencia.
Asimismo tuvimos la suerte de poder realizar dos observaciones, una entrevista completa, y de dar tres clases, dando de esta manera bastante tiempo para desarrollar hipótesis, ponerlas a prueba y enfrentarnos a diferentes problemáticas.
Para mi en particular fue una experiencia única, puesto que hasta ahora solo tenia experiencia con la exposición semi-dialogada, y en general puramente teórica. Este espacio me obligó y permitió pensar la enseñanza desde otras estrategias, pensándolas para el grupo en particular y para la temática a desarrollar.
Asimismo tuvimos la suerte de poder realizar dos observaciones, una entrevista completa, y de dar tres clases, dando de esta manera bastante tiempo para desarrollar hipótesis, ponerlas a prueba y enfrentarnos a diferentes problemáticas.
Para mi en particular fue una experiencia única, puesto que hasta ahora solo tenia experiencia con la exposición semi-dialogada, y en general puramente teórica. Este espacio me obligó y permitió pensar la enseñanza desde otras estrategias, pensándolas para el grupo en particular y para la temática a desarrollar.